Cómo crear la rutina de cuidado facial perfecta para ti
Selección de consejos, recomendaciones y tips de los expertos para crear la rutina de cuidado facial perfecta para ti teniendo en cuenta las características de tu piel. Sigue leyendo para conocer las mejores recomendaciones de los expertos para crear una rutina de cuidado facial perfecta.
En qué consiste una rutina de cuidado facial
En primer lugar, debes saber que no importa la edad que tengas, ya que todas las pieles, desde las más jóvenes y con tendencia grasa hasta las más maduras con tendencia a resecarse, necesitan de una eficiente rutina de cuidado facial para lucir hidratadas y saludables, evitar los brillos y prevenir la aparición de granos o puntos negros, así como también de las arrugas prematuras. La rutina de cuidado facial son todos aquellos hábitos realizados de forma diaria para limpiar, hidratar tu piel y protegerla del sol y de otros agentes externos. Es fundamental tener en cuenta nuestro tipo de piel y los ingredientes que pueden resultar más adecuados para nuestro cutis, así como también, cuáles pueden llegar a afectarle de forma negativa.
Por qué es importante tener una rutina de cuidado facial
Mantener una rutina diaria de cuidado facial es fundamental para tu rostro. Solamente siendo constantes con la higiene e hidratación facial y escogiendo rutinas adaptadas a nuestro tipo de piel conseguiremos eliminar las células muertas, hidratar y proteger nuestra piel del sol. Seguir una rutina de cuidado facial nos ayudará a mantener una piel saludable durante mucho más tiempo, a evitar el envejecimiento prematuro y a lucir una tez mucho más tersa y luminosa, evitando del mismo modo los brillos y los problemas más comunes a causa de la falta de una rutina adecuada en esta parte del cuerpo.
El primer paso es clave para prevenir la acumulación de grasa y de células muertas en las pieles más grasas, así como también es clave para que las pieles secas puedan hidratarse mejor. En segundo lugar, los tónicos faciales son totalmente necesarios para aportar a nuestro rostro las necesidades específicas que es imposible cubrir con la hidratación natural que se obtiene bebiendo agua, como los problemas de sebo o la aparición de algunas líneas de expresión. La hidratante es clave para mantener la piel tersa, joven y suave, así como para completar la hidratación que podemos obtener bebiendo agua y con una alimentación saludable y equilibrada, y la protección solar es fundamental para evitar el envejecimiento prematuro, la aparición de manchas en la piel e incluso para prevenir enfermedades más graves derivadas de una exposición solar excesiva sin protección.
Pasos indispensables en una rutina de cuidado facial
Para poder realizar una rutina de cuidado facial de manera eficiente, resulta fundamental seguir algunos pasos concretos. En primer lugar, un óptimo cuidado facial implicará cuatro pasos básicos. Primero, la limpieza. En este paso se busca eliminar toda la suciedad de rostro, el sudor, la grasa y los restos de maquillaje. Es un paso imprescindible, tanto para limpiar nuestra piel por el día como para hacerlo por la noche.
La tonificación es otra parte importante de cualquier rutina de cuidado facial. Los tónicos permiten minimizar los poros y calmar y suavizar la piel. Estas sustancias se aplican con compresas de algodón, siempre en pequeños toques.
Del mismo modo, otro de los pasos fundamentales en una rutina de cuidado facial perfecta es la hidratación. Actualmente es posible encontrar en el mercado una gran cantidad de productos diferentes con capacidad hidratantes: en formato crema, aceite, etc. Es fundamental incluirlo en la ruina facial diaria buscando opciones específicas que nos permitan tratar problemas específicos en nuestro cutis.
Finalmente, la protección solar es también fundamental para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel. Los rayos UV son realmente peligrosos para la salud, con lo que resulta imprescindible prevenir una exposición solar excesiva y proteger nuestro rostro con cremas con un factor de protección solar alto. Lo mejor es mantener esta rutina de cuidado facial dos veces al día, por la mañana o por la noche, obviando el paso del protector solar cuando nos vayamos a dormir. Además, por la noche podemos escoger cosméticos algo más grasos y que hidraten mejor la piel, ya que nuestro rostro podrá absorberlos por la noche sin que tengamos que salir con el rostro brillante a la calle.
Cómo saber qué productos usar para cuidar tu piel
Si te estás planteando qué productos pueden ser los más adecuados para usar en tu piel, lo primero que debes tener claro es que debes tener en cuenta cuál es tu tipo de piel. Existen diferentes tipos de piel con necesidades muy específicas como las pieles secas, las pieles grasas, las pieles mixtas y las pieles sensibles o atópicas. Del mismo modo, existen pieles con necesidades especiales, como las pieles maduras o las que presentan problemas de acné. Es por este motivo que resulta fundamental encontrar siempre productos perfectos para cada tipo de piel como los que ofrecen en https://academie.es/tiendaacademie/. Solamente de esta manera conseguiremos crear de manera eficiente una rutina de cuidado facial a nuestra medida y que nos permitirá mantener nuestro rostro joven, hidratado y saludable durante mucho más tiempo.
De esta manera, por ejemplo, una rutina facial ideal para una persona con la piel grasa podría se el realizar una doble limpieza facial usando un gel adaptado a su tipo de piel o algún tipo de jabón neutro que no engrase, junto con un aceite vegetal que permita eliminar por completo la suciedad del rostro.
Después esta persona podría usar un tónico facial para regular el exceso de grasa, para aplicarse a continuación una crema hidratante formulada para pieles grasas o mixtas. Por último, al escoger el protector solar sería interesante optar por opciones más ligeras, como los geles y sprays que aportan protección sin engrasar en exceso la piel.