Cuál es la terapia más efectiva para dejar de fumar
Uno de los hábitos más nocivos para la salud y más difíciles de abandonar es el del tabaquismo. Se calcula que el tabaco tiene una incidencia directa en más de 52.000 muertes al año en España, y la tasa de reincidencia es de las más altas en comparación con otras drogodependencias. La búsqueda de terapias alternativas en sustitución de los métodos tradicionales de abandono abrupto del producto causante de la adicción está a la orden del día, siendo algunas de ellas bastante polémicas por sus efectos secundarios nocivos. ¿Realmente hay un método infalible contra el tabaco? ¿Cuál es la terapia más efectiva para dejar de fumar? Vamos a tratar de arrojar algo de luz sobre el tema.
La voluntad, el primer paso para dejar de fumar definitivamente
Nada se consigue de la nada, y el primer paso para dejar de fumar es que, realmente, quieras dejarlo. La concienciación sobre los perjuicios que causa en el sistema respiratorio del ser humano es ya un paso importantísimo para dejar de fumar definitivamente, pero no te confundas: es solo un pasito en este largo camino que te llevará a abandonar del todo este nocivo hábito.
La fuerza de voluntad es vital mantenerla durante todas las fases de la terapia. El tabaco provoca dependencia a nivel químico y psíquico. La nicotina, adulterada con amoníaco para ser absorbida por el cerebro sin descomponerse y potenciar sus efectos adictivos, provoca el primer nivel de dependencia, pero es el relativo a los hábitos asociados el que supone un verdadero peligro durante la terapia y va a ser el enemigo a batir durante todo el proceso. La asociación del tabaco a otras actividades en nuestra vida cotidiana, como en los descansos del trabajo, después de las comidas o al salir de cervezas con amigos, provocará que recordemos, irremediablemente, que nos está faltando el tabaco cuando repitamos esas mismas acciones. Es en esos momentos cuando más hay que aferrarse a la voluntad para no tirar por la borda el esfuerzo de todas las semanas anteriores. No olvides que ya hemos dado los pasos más complicados.
¿Qué método es más efectivo a largo plazo?
El apoyo psicológico es fundamental para no recaer y empezar de cero de nuevo. No obstante, si esto ocurre, no te frustres: te estás enfrentando a una de las adicciones más fuertes y difíciles de superar, y nadie espera que lo consigas a la primera. De todos modos, hay que poner todo de nuestra parte para estar cuanto más tiempo mejor sin volver a coger un cigarrillo.
El método ideal para dejar definitivamente el tabaco es aquel que se sustenta en terapias de sustitución de nicotina por otros productos inhibidores de sus efectos (el cacao y el azúcar son excelentes inhibidores de nicotina, de ahí la tendencia a engordar cuando se deja de fumar). Pero mantener la atención psicológica es primordial. No hay que subestimar los cambios químicos que sufre el cerebro cuando se le priva de una droga: el carácter cambia, los procesos de razonamiento se ven modificados, se puede alterar la percepción de las cosas y todo ello merece atención especializada. Todo ello, combinado con la administración meramente de apoyo de dosis ínfimas de nicotina por vía cutánea, en forma de parches o similar, resulta ideal para mitigar los efectos del síndrome de abstinencia, que se estima que sufren 7 de cada 10 pacientes que dejan de fumar.
Una alternativa efectiva a corto y largo plazo
De entre la multitud de métodos existentes para abandonar el hábito del tabaco, uno de los que mayor eficacia ha demostrado ha sido el de la hipnosis clínica. El Instituto Somos, afincado en Valencia, está formado por un equipo de psicólogos profesionales especializados en la administración de tratamientos psicológicos mediante hipnoterapia. A través su página web puedes consultar las bases del tratamiento a través de hipnosis, qué miedos te van a ayudar a combatir y los beneficios que puede reportarte el dejar de fumar con este método revolucionario.
La base de la hipnoterapia se basa en la sugestión, no en la magia ni nada milagroso. La sugestión es un elemento de tremendo poder para el cerebro capaz de modificar su conducta y a través del cual es posible reeducarlo para desprenderlo de hábitos nocivos adquiridos, como el ejemplo que nos ocupa. La principal baza de la hipnosis clínica es la obtención de resultados en muy poco tiempo. De hecho, el Instituto Somos muestra en su página web institutosomosvalencia.es la posibilidad de dejar de fumar en apenas dos sesiones de hipnoterapia, mostrando los efectos beneficiosos de este tipo de terapias y sus rápidos resultados a través de la reeducación.
Al ser un proceso personal y único en cada persona, esta terapia de hipnosis va a acompañada de un seguimiento individual personalizado para trabajar, uno a uno, con los pacientes para indagar acerca de los motivos por los que amaban el tabaco, de manera que queden expuestos los lazos que unen al hábito con el consumidor y averiguar la mejor forma de romperlos para maximizar el éxito de la terapia. También se ve complementado con actividades específicas para prevenir recaídas, algo que también merece un seguimiento exhaustivo individual.
Un aspecto fundamental en los tratamientos con hipnoterapia es la búsqueda del subconsciente y averiguar las ideas arraigadas que tenemos en nuestro cerebro de manera inconsciente que nos mantienen pegados al hábito de fumar. Muchos de estos elementos que ni siquiera el propio fumador conoce están relacionados con la autoestima o la seguridad en uno mismo.
El objetivo de la hipnoterapia
A través de la hipnosis clínica se pueden trabajar y averiguar las causas que motivaron tu acercamiento al tabaco, los motivos, aparte de los químicos, que te han hecho mantener el hábito hasta la actualidad y ayudarte a desprenderte de la sensación de que, sin tabaco, no puedes afrontar tus rutinas diarias. Desautomatizar el hábito de fumar es primordial, y el objetivo final es que puedas tomar una decisión libre y consciente por ti mismo, sin tener que fumar por inercia.
Su equipo de profesionales te ayudará a trabajar la autoestima y la motivación, enseñándote de qué puedes ser capaz y acompañándote en cada éxito y, sobre todo, en cada fracaso a lo largo de tu camino para dejar atrás el tabaquismo.